En Fundartis estamos convencidos de que una mejor sociedad se construye entre todos, y hoy tenemos la posibilidad de comprometernos aportando nuestro pequeño grano de arena para ser parte del cambio que deseamos para el futuro.
Un niño que se acerca a la música se hace rico espiritualmente y es capaz de enfrentar la adversidad con mayor fortaleza, porque no está solo. El arte le ofrece un grupo de pertenencia, cuenta con sus profesores, sus compañeros, su espacio de aprendizaje, sus compromisos y la posibilidad de sentirse valorado y admirado.
El arte no solo fortalece espiritualmente sino que en la mayoría de los casos produce cambios favorables también en el núcleo familiar.
La música transforma y en Fundartis somos testigos de ello a diario.